En una decisión sin precedentes en la historia judicial de Colombia, el expresidente Álvaro Uribe Vélez ha sido condenado a 12 años de prisión por los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal. La jueza Sandra Liliana Heredia emitió el fallo tras considerar que las pruebas presentadas durante el juicio demostraron de forma contundente que Uribe participó activamente en una estrategia para manipular testigos y desviar el curso de investigaciones judiciales.

La sentencia contempla detención domiciliaria inmediata, teniendo en cuenta la edad del exmandatario (73 años) y sus antecedentes como expresidente de la República.

El caso se remonta al año 2012, cuando Uribe presentó denuncias contra el senador Iván Cepeda, acusándolo de manipular testigos para vincularlo con grupos paramilitares. Sin embargo, las investigaciones posteriores revelaron que fue el propio Uribe quien, a través de terceros, habría ofrecido beneficios a testigos para que declararan a su favor, distorsionando así el curso de la justicia.

Entre las pruebas clave se encuentran interceptaciones telefónicas, declaraciones notariales, registros de visitas a cárceles y comunicaciones entre abogados y testigos. La Fiscalía y el tribunal coincidieron en que existió una red articulada para influir indebidamente en procesos judiciales.

Con esta decisión, Uribe se convierte en el primer expresidente colombiano condenado por delitos relacionados con corrupción judicial. El fallo ha generado reacciones encontradas: mientras sectores políticos y sociales celebran la decisión como un avance en la lucha contra la impunidad, seguidores del exmandatario han manifestado su rechazo y anunciado movilizaciones en su defensa.

El equipo jurídico del expresidente ya anunció que presentará recurso de apelación ante instancias superiores, alegando violaciones al debido proceso y falta de imparcialidad.

Este fallo representa un hito para el Estado de Derecho en Colombia y envía un mensaje claro: nadie está por encima de la ley, sin importar su cargo o influencia política.